Ruta en paddle SUP por el litoral sur de Jávea en la que acantilados, calas, islas y cuevas de acceso exclusivo por mar se suceden. Sin duda uno de los tramos más hermosos, interesantes y salvajes de la costa de Alicante.
En el punto más meridional de Jávea (Xàbia), dentro del Parque Forestal de la Granadella y encajonada entre acantilados, se encuentra la Cala Granadella, una ensenada de grava con 200 metros de longitud y aguas cristalinas. Se trata de una de las playas más famosas de la Costa Blanca y tiene bandera azul desde 1987.
En esta cala, a la que llegamos siguiendo una sinuosa carretera rodeada de pinos, comienza la ruta de paddle SUP que a continuación cuento.
He venido hasta aquí con Aida y Javi con quienes he compartido bastantes actividades. Los tres juntos hemos escalado las vías Chica Sputnik y Rafael Gutiérrez, ambas en el Cabeçó d´Or. Solo con Aida he hecho la Directísima en la Pared Negra de Orihuela, y con Javi he compartido un montón de rutas de todo tipo. Por citar alguna, el Canuto norte de la Alcazaba, El Libro de Eibon + Patricia Rítmica, la Ferrata del Ponoig o la vuelta al Peñón de Ifach en paddle SUP.
Paddle SUP en el litoral sur de Jávea
Aunque hemos quedado a las 6:30h, hora que ha desanimado a más de uno a acompañarnos, no comenzamos a remar hasta las 9:00h. Y es que entre llegar, la parada al café y preparar el material se nos ha ido mucho tiempo. Aún así la playa está prácticamente vacía, únicamente coincidimos con un grupo que llega cuando nosotros zarpamos.
Cala Granadella – En Caló
Salimos de la Granadella en dirección norte con un ligero mar de fondo. Navegamos junto a los acantilados y cuando aún no llevamos ni media hora remando llegamos al primer lugar con encanto de la ruta.
Custodiada tras una gran peña que se encuentra a escasos metros de la orilla, se oculta una de las joyas de la costa de Alicante, la cala En Caló. A pesar de su acceso, exclusivo por mar y únicamente cuando está en buenas condiciones, últimamente recibe muchas visitas. Y es que es un lugar mágico que se ha hecho viral en las redes sociales con el sugerente nombre de Cala Secreta.
Sin embargo, esta popularidad tiene consecuencias. Por una parte rescates a gente que ha conseguido desembarcar, pero que la fuerza del mar ha impedido volver. Y por otra turistas, que localizaron la playa en Google Maps y confiaban en llegar por tierra cargados con todos los bártulos de playa (sombrilla, nevera, suegra…), y se han visto expuestos a situaciones delicadas, enriscados al borde del acantilado y con chanclas. Por suerte de momento no ha habido consecuencias.
Pero volvamos a la ruta. Un estrecho paso, que encajona el agua y hace que la poca mar de fondo que hay entre con cierta fuerza, permite llegar hasta la orilla. Desembarcamos en la playa que parece sacada de una película de piratas.
En Caló – Cova del Llop Marí
Tras un buen rato disfrutando de este idílico lugar en el que aprovechamos para hacer fotos e hidratarnos, volvemos al mar. Nuestro siguiente objetivo no se encuentra lejos, se trata de la primera de las tres cuevas marinas que vamos a recorrer durante esta calurosa mañana primaveral, la Cova del Llop Marí. Es además la única que disfrutamos en completa soledad.
Javi desembarca para hacer unas fotos mientras Aida y yo le esperamos en nuestras tablas de paddle. Me impresiona el color turquesa y la transparencia del agua.
Ni a esta cueva, ni a la Cueva de los Órganos (Cova dels Òrguens), ni a ninguna del litoral de Jávea está permitido el acceso con embarcaciones a motor. Una acertada medida tomada por el ayuntamiento en 2016 para preservar el entorno y velar por la seguridad de la gente que llega por sus propios medios. Sin embargo, es una medida que mucha gente incumple. Nosotros en la Cova dels Òrguens vemos dos motos de agua y una neumática.
Cova del Llop Marí – Playa del Ambolo – Cueva de los Órganos
Volvemos al mar con la mente puesta en la playa de Ambolo. Rodeamos la Isla del Descubridor (Illa del Descobridor) -en lugar de cruzar el estrecho que deja con tierra por el que volveremos- y nos dirigimos a la citada playa. Sin embargo, en lugar de llegar a tierra, nos vamos a un pequeño islote que hay enfrente. Allí anclamos las tablas.
Vamos a pasar un rato aquí haciendo psicobloc. Podríamos haber elegido otros muchos lugares porque la ruta que estamos siguiendo pasa por un montón de acantilados donde practicar esta variante de la escalada cuyo único seguro es el agua del mar.
Aunque escaló con cierta regularidad, psicobloc es la primera vez que hago y la verdad es que impone más de lo que a priori cabría pensar.
Tras unos cuantos chapuzones, risas y tensión volvemos a la ruta rumbo al Cabo de la Nao bajo cuyos cortados está la Cova del Orguens. Bordeamos el cabo y cruzamos la primera entrada de la cueva aunque de momento no entramos, vamos a la siguiente a la que sí accedemos y donde además desembarcamos.
En esta ocasión además de las fotos y el disfrute del lugar, aprovechamos para comer algo. Estamos solos, aunque cuando nos vamos llega una pareja que también desembarca. Volvemos a las tablas para dirigirnos a la cueva de al lado.
Aquí la cosa cambia, hay por lo menos 30 kayaks además de varias tablas de paddle, dos motos de agua y una neumática. Navegamos por el interior de la cueva y tras disfrutar de este impresionante lugar emprendemos la ruta de vuelta.
Vuelta a la Cala Granadella
Aún hacemos una última parada en los cortados que hay en el estrecho del Ambolo frente a la Illa del Descobridor para repetir con el psicobloc, aunque esta vez le dedicamos muy poco tiempo.
Tras los chapuzones de rigor volvemos a la Cala Granadella donde ahora sí, hay muchísima gente, no solo en la playa, también en embarcaciones fondeadas enfrente. Tal es la cantidad de barcas, fuerabordas y veleros que para entrar evitando el laberinto que forman, decido acercarme al Morro del Castell -un pequeño cabo en cuyo extremo se encuentran los restos de un torreón vigía del siglo XVIII-, para desde allí navegando junto a la costa entrar en la playa.
Una vez en tierra recogemos el material mientras disfrutamos de unas cervezas, y antes de volver a casa nos damos un último chapuzón para ir frescos.
Ha sido una preciosa ruta en la que hemos descubierto parte del litoral sur de Jávea, que está recortado por abruptos acantilados, calas, cuevas marinas y un mar cristalino de espectaculares tonos turquesa. Destacan las calas de Granadella, En Caló y Ambolo, y las cuevas del Llop Marí y dels Orguens.
Simplemente impresionante. ¡Hasta otra!
Galería de fotos
Mapa de la ruta
Resumen de la actividad
Entorno y medio | |
---|---|
Marina Alta de Alicante | |
Litoral de Jávea. LIC Penya-segats de la Marina | |
Espacio natural protegido | |
Cielo despejado. Mar entre llana y rizada | |
Ver en Wikiloc |