Tres cortas excursiones en familia por el Bajo Bidasoa

De las siete comarcas que tiene Guipuzkoa, la del Bajo Bidasoa es la más septentrional y pequeña. Se trata de una comarca transfronteriza que incluye además de Hondarribia e Irun la vecina localidad vasco-francesa de Hendaya. Los tres municipios se sitúan en la desembocadura del río Bidasoa alrededor de la Bahía de Txingudi.

Durante nuestras últimas vacaciones de Navidad estuvimos en Irun visitando a la familia e hicimos tres pequeñas excursiones en esta comarca guipuzcoana, una en cada uno de sus tres municipios.

Hondarribia. Monte Jaizkibel

Jaizkibel es un espinazo rocoso que se encuentra entre las localidades de Pasaia y Hondarribia. Esta muralla de arenisca frena el empuje de las olas formando espectaculares acantilados y bonitas calas.

La primera excursión fue en este monte. Surgió a raíz de una quedada con algunos de mis primos. Con la excusa de vernos y comer juntos mi prima Olga propuso esta ruta para hacer hambre. Caminamos desde el faro de Higuer hasta el bar restaurante Justiz siguiendo la línea de la costa.

Nos juntamos una buena tropa. Entre primos, parejas e hijos 30 personas, vamos una excursión familiar en toda regla.

La excursión sigue una estrecha senda paralela a la costa en un sube y baja suave pero constante. Se trata de un bonito paseo donde se dan la mano monte, cielo y mar.

Terminamos la ruta en Justiz donde comimos.

Una excursión corta y fácil que me dejó con ganas de conocer este monte en profundidad. Muy recomendable.

Mapa de la ruta

Irun. Parque Natural Aiako Harria

Sin ser una excursión exigente, esta fue la más montañera de las tres. Se trata de una ruta circular cuya primera parte conocí el verano pasado cuando hice esta completísima excursión por las Peñas de Aia (de las mejores que tengo reseñadas en el blog). Fue entonces cuando pensé que en Navidad le enseñaría esta zona a mi madre.

Tiene la ventaja de que si, como hicimos nosotros comienzas en el merendero de Erlaiz, los caminos hasta al llegar al coto minero de Irugurutzeta, desde donde es posible volver a casa dando un paseo, son todos de bajada. De este modo mi madre, sobrinos e hijos pudieron conocer esta zona sin necesidad de hacer la dura subida que supondría empezar desde abajo.

La ruta comienza en el merendero de Erlaiz y siguiendo el sendero balizado PR-GI 1012 pasa por el arroyo de Meazuri y los túneles de Askain. Algo después de los túneles abandona el PR y sigue por el SL-GI 1006 hasta en el Coto Minero de Irugurutzeta.

En este punto nos dividimos. Unos se van a casa dando un paseo y otros volvemos a por los coches.

Lo hacemos del siguiente modo: hasta el punto donde habíamos abandonado el PR por la misma senda que ahora es una dura subida, y a partir de ahí siguiendo la continuidad de dicha senda balizada, que es circular y pasa junto al lugar donde habíamos aparcado.

Tenía muchas gracias de enseñar esta zona a mi familia. Disfrutamos e incluso, los adolescentes, que comenzaron poco motivados reconocieron que les había gustado mucho. Y es que el arroyo de Meazuri, los túneles de Askain, la cascada Aitzondo y el Coto Minero de Irugurutzeta hacen de esta, una original y variada ruta que además tiene magníficas vistas sobre la bahía de Txingudi.

Mapa de la ruta

Hendaya. Playa de Ondarraitz

Esta ruta más que una excursión es un paseo. Corta y sin desnivel, la he incluido a pesar de transcurrir íntegramente por terreno urbano por lo mucho que la disfrute y lo mucho que me gusta el entorno.

Partiendo de la Avenida de Iparralde en Irun, cruzamos el río Bidasoa situándonos en la vertiente francesa. Basta con seguir la orilla del río, al principio por una pasarela de madera luego por un bonito paseo urbano.

Es fácil ver aves limícolas ya que la subida y bajada de las mareas convierten a este terreno en un hábitat óptimo para estas aves.

Al llegar al puerto de Sokoburu tomamos cualquiera de las calles que salen a mano derecha y que conducen a la playa.

La llegada a la playa de Ondarraitz con la marea baja y con el día despejado fue maravillosa.

La vuelta la hicimos por el mismo camino de ida y al terminar, al igual que cuando fuimos a las Peñas de Aia fuimos a la plaza de San Juan de Irun a tomar unos pintxos. No hay mejor modo de terminar una buena actividad.

Tres rutas que nos han permitido disfrutar y conocer el entorno del Bidasoa-Txingudi desde tres puntos de vista diferentes. Todas ellas muy recomendables.

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